La vida es oscura, muy oscura en esta serie. Pero asquerosamente divertida gracias a Happy y la historia que nos trae. Happy es un amigo imaginario y achuchable con forma de un caballo esponjoso con alas.
En realidad es lo único bello y bonito que vais a ver de esta serie llena de horror por todas partes con dramas muy reales a pesar de estar vestidos, disfrazados y pintados de locura y fantasía.
Nick Sax es el típico policía violento de muchas peliculas y series estadounidenses con graves problemas con el alcohol, por no decir que es un borracho violento que necesita de su chute para poder seguir viviendo. Actualmente es un ex-policía y asesino a sueldo y que en una nueva noche en la “oficina” se ve envuelto en un crimen en el que está implicado un Papá Noel y niños. No, no es nada bonito lo que sigue después porque la intrahistoria es algo de lo que nadie quiere hablar por que es terrible. Os invito a que lo descubráis por vosotros mismos y que también leáis el cómic escrito por Grant Morrison, una pieza espectacular poco conocida pero muy necesaria.
La locura empieza a salpicar a todo el mundo y no te parece tan malo un protagonista turbio nacido del fango cuando ves a la verdadera maldad campar a sus anchas sin que nos enteremos.
Si hacemos un hueco en esta crítica a otros personajes podríamos decir que tienen una actuación aceptable. Resaltando a Richi Coster, un actor poco reconocido, pero con mucha experiencia tanto en cine como en televisión. Le podréis reconocer en Batman: The Dark Knight en su papel de mafioso. En esta serie interpreta al Señor Blue, un mafioso con más importancia de la que aparenta. Y a su mujer, Isabella Scaramucci, interpretada por una genial Debi Mazar, con papeles normalmente secundarios pero siempre atrayente. Su primer papel importante fue en Goodfellas más conocida en España como Uno de los nuestros. Y siguiendo con España, es la actriz que interpreta a Ava Gardner en la serie Arde Madrid.
En otro orden de cosas tenemos que anunciar con mucha tristeza que se haya cancelado esta serie en su segunda temporada que sólo alcanzaba una audiencia de 300.000 personas en directo a través de la cadena SyFy. Pero, os advierto una cosa, es mejor que sean sólo dos temporadas de algo magnífico que una serie con 9 temporadas y sumando como puede ser The Walking Dead dejando que se pudra poco a poco, y ya no sólo con el paso del tiempo sino también por el propio guión.
Esta serie no la han cancelado porque sea aburrida precisamente, sino porque es una comedia muy oscura que se deja llevar por la sangre, rozando en algunos momentos el gore (luchar mientras patinas en sangre nunca fue tan divertido). Es una serie que no puedes ponérsela a tu abuelita que está sentada es su butaca preferida mientras hace ganchillo a no ser que esta sea una psicópata y haga cosas malas con sus agujas.
