Título original: Kimi no na wa (Your Name)
Año: 2016
Duración: 1h 46m
Género: Animación. Drama. Fantasía. Romance
País: Japón.
Dirección: Makoto Shinkai.
Guión: Makoto Shinkai (basado en su novela).
Música: Youjirou Noda (Radwimps)
Plataforma: Filmin y Netflix.
¿Qué pasa, Ociofrikers?
Hoy pongo al volante a mi lado más romanticón para hablaros de una maravillosa pastelada que estuvo y sigue estando en boca de todo el mundo.
He de deciros que suelen interesarme bastante poco las historias románticas convencionales de chico conoce a chica, pero cuando meten algún elemento que me rompe los esquemas, ya me ganan. Esta película es un clarísimo ejemplo de ello. Voy a intentar contaros un poco de qué va la historia, sin espoilearos demasiado.
El peso de la historia lo llevan una chica llamada Mitsuha y un chico llamado Taki. Él vive en Tokio y ella en un pueblo del que quiere escapar, porque no tiene ni una triste cafetería. Ella sabe que en Tokio hay cafeterías a porrillo (y algunas hasta con gatos), así que es donde quiere acabar viviendo. Hasta aquí todo normal, ¿verdad?
Bueno, pues agarraos que metemos directamente segunda.
Resulta que tienen la extraña manía de intercambiar sus cuerpos y de no acordarse de nada después.
Vaya, que algunos días ella amanece en Tokio en el cuerpo de Taki y este amanece en el pueblo y en el cuerpo de Mitsuha. Estos intercambios corporales no son voluntarios en absoluto y tampoco son diarios, sino que se dan de forma aleatoria. Si a eso le sumamos que al día siguiente no se acuerdan de nada, imaginaos el cacao mental al despertar de nuevo en sus cuerpos originales y ver que todos te miran raro.
Porque claro, Mitsuha es muy resuelta y le va arreglando algún que otro sarao a Taki cuando despierta en su cuerpo, pero Takito San es menos delicado que un bocata de chinchetas y se las lía un poco pardas cuando le toca amanecer en el pueblo.
Afortunadamente, estos problemillas se van arreglando mediante notas y recordatorios mutuos que se dejan para guiarse tras el cambio de cuerpos. Y claro, se acaban cayendo simpáticos y Taki decide echarle valor e ir a ver a la moza al pueblo.
El caso es que surge un pequeño problemilla y el encuentro no se da (nótese el esfuerzo por no espoilear). Así que Taki decide volver a Tokio y al haberse paralizado el intercambio de cuerpos, el tiempo pasa y la historia queda en una mera anécdota. Peeeero (aquí es cuando entra en juego la magia de amor), nunca termina de olvidarse por completo y decide retomar el asunto.
A partir de aquí, sería muy difícil continuar sin espoilearos, así que terminaré diciéndoos que os esperan muchos giros guays, una banda sonora espectacular, mucho romanticismo y mucha mucha fantasía.
Creo que no me equivocaré si os digo que nunca habéis visto algo similar, así que ya estáis tardando.
Como dato curioso, os diré que las localizaciones de la peli están basadas en lugares reales y que las escaleras de la escena final se convirtieron en punto de peregrinaje para toda persona amante del film.
Animaos y vedla. Os doy mi frikipalabra de que os va a gustar 😉
