Morgana fue una de las mejores alumnas del mago Merlín pero su ambición la corrompió y traicionó a su maestro robándole el Santo Grial. Este objeto le otorga un poder increíble y Merlín quiere recuperarlo a toda costa. Soy los únicos capaces de superar las trampas de Morgana y devolver el Grial a su legitimo dueño.
En algún momento u otro, todos los aficionados a los escape rooms hemos soñado con montar nuestra propia sala. Conseguir un local a un precio asequible, imaginar una buena historia y convertir nuestra pasión en nuestra fuente de ingresos. Pero montar una buena sala de escape room no es tan sencillo como parece y Minos: La casa de la maga Morgana es un claro ejemplo de ello.
Inventar la historia puede no ser complicado pero crear una ambientación acorde a ella y con unas pruebas o acertijos que funcionen en armonía con el conjunto ya requiere un trabajo extra y en esta sala este trabajo brilla por su ausencia. Ya sea en una playa remota o en una mansión abandonada, una sala de escape room debe trasladarte de inmediato al corazón de una historia. Sentir que formas parte de algo y vivir en una realidad alternativa durante los 60 minutos que dura la experiencia es la base de las salas de escape room y en Minos: La casa de la maga Morgana esto no ocurre. La sensación de desconcierto al entrar es completa. Nos encontramos con una habitación con elementos decorativos totalmente inconexos y con poca (o nula) relación con la historia que nos han propuesto vivir. A medida que avanzamos esto no hace más que empeorar.
Si la ambientación esta poco trabajada los rompecabezas tampoco se quedan atrás. Nunca me quejaré de una sala difícil o de un acertijo que no pueda superar siempre que en algun momento u otro sea capaz de entender su lógica o descubrir su funcionamiento de forma racional y aquí me he encontrado con algunos rompecabezas que ni después de que el gamemaster los explicaran entendí su lógica. Quizás es culpa mía pero con unos cuantos escape rooms a las espaldas y aún sin considerarme un experto la sensación de tomadura de pelo fue total.
Igual que pasó con las barberías o los restaurantes japoneses cuando algo se pone de moda son muchos los que quieren subirse al carro y aprovechar el momento sin darse cuenta del posible daño que pueden hacer a aquellos que hacen un buen trabajo e intentan ofrecer una buena propuesta de ocio. Los aficionados con experiencia saldremos decepcionados y sin ganas de acercarnos a las dos otras salas que propone en Minos pero conscientes que hay muchas otras buenas propuestas. El problema lo veo en aquellos que prueban aquí un escape room por primera vez y se queden con la idea que todos los escape room son así.
Datos
Dirección: C/Maria Jollis i Pellicer , 34 – 17800 – Olot
Localidad: Olot
Web y reservas: www.minos.cat
Información: Escape room para grupos de 2 a 6 integrantes
