Dentro de poco cae la sexta temporada de Bojack Horseman, una serie que absorbes por culpa de Netflix y su sistema de subir todos los capítulos a la vez – J’accuse Netflix-. ¿La fecha exacta? No lo sabemos aún, pero seguro que se estrenará en el verano del 2019 o en septiembre. Esta serie, es una tragicomedia, en el que los personajes luchan y sobreviven en un Hollywood que arrolla y absorbe todo lo que pilla a su paso. En el que, si no estás a la moda, no vales para el espectáculo.
El creador de esta serie es R. Bob-Waksberg. Un cómico estadounidense que se siente influido por series como Seinfield y Los Simpsons, dos clásicos de los años 90. Aunque la serie tenga estas influencias más sobresalientes también tiene otras influencias. La más visible es la mezcla de antropomorfos y seres humanos. Idea que, aunque nos parezca nueva, ya surgió en los años 80 con la película Quién engañó a Roger Rabitt. Un universo en el que dibujos animados y seres humanos convivían sin problemas aparentes. En Bojack, aunque no sea igual, sí que bebe de esa misma fuente al interactuar y fundir ambos universos. También tiene otras influencias como Futurama, Archer o South Park.
Pero no nos pongamos la pipa en la boca y nos acariciemos la perilla. Vayamos a lo importante y por qué esta serie es una de las mejores series animadas para adultos del momento.
Este medio caballo medio hombre, a pesar de ser el típico personaje caótico que rompe todo lo que toca, a diferencia de otros como Charlie Harper (Dos Hombres y Medio). Él, quiere evolucionar a pesar de los contratiempos. Es un personaje maltratado por su pasado y con ganas de ser feliz. Aunque sus adicciones se lo pongan muy difícil, el intenta mejorar a través de cómo el ve la realidad. Es un cínico con el que algunas veces (casi todas) estarás de acuerdo.
B.Horseman está muy bien acompañado por personajes que le complementan y le cuidan sin reirle la gracia e incluso personajes que son su némesis.
El caso de Princess Carolyn, su representante y ex novia, le cuida fervientemente aunque este sea un cabronazo de vez en cuando. Le cuida por ser amigo y por ser su representante, necesita que trabaje a pesar de ser una estrella olvidada de los 90 por haber hecho la serie Retozando. En el que interpreta a un padre adoptivo de dos humanas en la que los finales de cada capítulo sin moralinas. Sí, en efecto, como casi cualquier sitcom familiar de la época. Princess Carolyn es una gata motivada y luchadora tal y como reza el típico póster de la gata colgado de una cuerda. ¡Aguanta nena!
El siguiente de esta lista sin orden ni concierto es Todd Chávez, un ser medio vagabundo medio chico perdido con gorro de lana. Un soñador empedernido que intenta ser felíz y llevar proyetos adelante tales como poner tiendas de Halloween durante todo el año o una consulta de payasos dentista a domicilio. Ideas locas que tienen un mecenas por detrás del que hablaremos en el siguiente párrafo. Todd a pesar de sus locuras, tienes que quererle. Es un buenazo que intenta valerse por sí mismo en un mundo en el que no se siente a gusto. Abrazale pero no fomentes sus ideas. Por favor.
El que aviva la llama de la imaginación sin pies ni cabeza de Todd es el Señor Peanutbutter. El típico guaperas, rubio y con menos luces que un tablón de madera. Pero, es otro buenazo. Otro soñador con pasta y que se dedica al espectáculo porque lo vale y la gente lo quiere. ¿Cómo no vas a querer a un Golden Retriever? ¡Pero si son adorables!
Por último, para finalizar la lista de personajes principales tenemos a, quien es para mí el personaje que mejor comprende a Bojack. Su disocial amiga Diane Nguyen. Una escritora/guionista/bloguera. Que conoce a Bocjack porque así lo marca el destino y el desarrollo de esta serie y quien más le mete en vereda junto con Princess Carolyn. Un personaje autodestructivo que se odia a sí misma cada vez que las cosas van bien.
Es una serie que, puedes amar o detestar. Pero que al menos, no te deja indiferente. ¿Verdad (Des)encanto?
